¡Puede fallar hermano! 😊
Esa fue nuestra frase de cabecera durante los 15 días en los que preparamos la clase de ayer.
Fue nuestro “mantra” desde el humor para darnos coraje y ayudarnos a no encontrar excusas para abandonar nuestra idea.
Los pongo en contexto:
La clase en cuestión era del “Taller de Oratoria y Simulación” en la Diplomatura de Juicios por Jurados en la Universidad de San Isidro, que dictamos junto a mi querida Vicky (Victoria Santamarina). El tema a trabajar era la Audiencia de Voir Dire, que es la audiencia en la que las partes (fiscales y defensores) interrogan a los candidatos a jurado para seleccionar (deseleccionar en realidad) al jurado que intervendrá en el juicio.
En la otra normalidad la audiencia de Voir Dire ya era desafiante. Requiere el desarrollo de todas las habilidades blandas: escuchar, generar confianza, horizontalidad, saber preguntar … Por zoom mucho mas ☹
¿Qué queríamos lograr? Simular la audiencia de voir dire, como lo hacíamos en la otra normalidad, pero esta vez desde el zoom. Generar un espacio donde los participantes puedan experimentar en carne propia el desafío de voir dire.
¿Qué podía fallar? Muchas cosas … la tecnología, la forma en la que la habíamos organizado, la actitud y motivación de los participantes …
¿Qué estaba en juego?
El aprendizaje de los participantes … que no se llevaran nada de la clase …
- El nombre y prestigio de la diplomatura
- Para nosotras Voir Dire es una instancia muy importante por lo que significa en el marco del juicio por jurados: lograr un jurado imparcial e independiente
- Y también nuestra imagen personal
Y entonces nos dijimos: Si nosotras decimos en nuestros talleres que para Voir Dire hay que “animarse” a hacer, escuchar a los candidatos y al contexto, hay que estar preparado para “recalcular” en cualquier momento, nosotras tenemos que animarnos a jugar un Voir Dire por zoom ….
Y lo hicimos gracias a que:
- Asumimos que las cosas podían salir en forma distinta a lo planificado y que posiblemente tuviéramos que recalcular …
- Confiamos una en la otra
- Las autoridades de la Diplomatura nos dieron absoluta libertad para hacer “algo nuevo”
Salió bien. ¡Muy bien!. Tan bien que todos nos quedamos media hora mas del horario de clase porque resultó una experiencia super interesante. Aprendimos un montón.
Hacer una clase teórica hubiese sido mucho menos desafiante y estresante, pero no nos hubiese dejado tanto aprendizaje.
Así que me quedo con ¡Puede fallar hermano! …. Animarse …. Estar listo para recalcular … abrirse a aprender …
¡Lindo martes!