Una hermosa mañana de sol, una mamá y su hijito de 5 años caminaban rumbo al colegio. El nene caminaba contento y orgulloso llevando su mochila nueva que tenía el dibujo de su personaje favorito: Frozen.
En el camino se encontraron con una nena y su mamá. La nena se quedó enamorada de la mochila y le dijo a su mamá “mami qué hermosa mochila”. La mamá de la nena con cara de disgusto le dijo: “¡No lo puedo creer! Esa mochila es de nena”.
Cuando llegaron al colegio algunas personas miraron la mochila nueva con admiración, mientras que otros se reían mientras cuchicheaban. Al nene no le importaba. El estaba feliz con su mochila.
Un señor le preguntó: ¿por qué tenes una mochila de nena? El respondió: “Amo a Frozen. ¿Quién dijo que es de nenas?
Su mamá se sintió tremendamente orgullosa de su hijo: ¡Cuánta confianza y respeto tenía hacia sí mismo y sus sentimientos!
El mundo está cambiando. Los chicos ya vienen con un nuevo chip de sabiduría y equidad. Nos enseñan que as personas somos personas independientemente del género, estatura, talla, color … Nuestro gran desafío es aprender de ellos. Tomar conciencia de los anteojos que tenemos puestos, sacarlos y ampliar nuestra mirada de la realidad.
¡Abrazo!
¡Linda semana!
Andrea